Después de una custodia compartida “impuesta”, en Córdoba, ahora toca en Valladolid imponerla a un padre.
Con los únicos datos que facilita la prensa no se puede hacer una reflexión en profundidad, pero sí sacar punta a algunas cosillas que informan. Antes de nada, se desconoce si dicha sentencia es firme o va a ser recurrida.
Sí que sería de agradecer que esta sentencia fuera origen de otras muchas, en que lo piden los padres, y la madre se opone. Veamos:
“La magistrada entiende que debido a la edad de los hijos en común, éstos precisan de un mayor contacto con el progenitor y una mayor implicación de él en la vida cotidiana de sus hijos.”·
Quiero pensar que eso que piensa la Ilma. Sra. Magistrada es lo que alegan miles de padres cada año para pedir una custodia compartida que les es denegada.
Se añade que los menores cuentan con problemas de adaptación en el colegio.
Por otra parte, “se indica que desde que se separaron los litigantes ha recaído sobre la madre una mayor carga para el cuidado de los hijos.”
Es de pensar que eso lo saben todas las madres que se oponen a la custodia compartida, pero, claro, habría que ver las circunstancias sociales de cada caso, porque, como saben Uds., a cambio de quedarse con los niños, los niños se llevan la casa familiar, en muchos casos.
Por cierto, les cuento una anécdota. Hace unos años, la jueza titular del juzgado con competencia de familia en Burgos, en unas jornadas de derecho de familia, indicaba: el que se va de casa se lleva el cepillo de dientes. Pensó un poco más, y añadió: también el pijama.
Se indica en la información periodística que hubo un divorcio de mutuo acuerdo. Quizá no fue un acuerdo muy reflexionado, para ahora alegar esto la madre. Si me permiten, esos convenios de mutuo acuerdo, en separaciones y divorcios, se pueden presentar con la separación o divorcio, bien por acuerdo de los dos, o del uno con el consentimiento del otro. Ojo, por lo que se indica, parece que los hijos tienen problemas, y da que pensar que fue un divorcio no tan feliz como se presentó al juez. Y si el divorcio sólo lo quiso uno de los dos, pues debiera haber sido pedido por uno con el consentimiento del otro.
Se les dejan estas reflexiones a Uds., no sin antes señalar que, cuando una mujer quiere la custodia compartida, es fácil que se otorgue, pero si se opone, parece muy muy difícil. Conclusión que le suelo decir a Manolo:
Dan más custodias compartidas las mujeres que los jueces.
Feliz primavera.
Jesús Ayala Carcedo, delegado de la Asociación de Padres de Familia Separados de Burgos-A.P.F.S.-BURGOS. 8-5-2.018.