LA REPRESIÓN SEXUAL EN ESPAÑA AFECTÓ A TODA LA POBLACIÓN, NO SÓLO A LOS HOMOSEXUALES

Cuando estos días han celebrado el ORGULLO GAY, y diversas personas han salido a la luz pública, por haber sufrido sanciones o castigos por su condición sexual, van a permitirme contar algunos casos de cómo se trataba esto del sexo para toda la población.

–        Una buena amiga ya fallecida, me contaba que fue amonestada por llevar mangas cortas en uno de los paseos de Burgos. Años cuarenta, cincuenta o sesenta.

–        Recuerdo haber escuchado por la radio, en relación con el libro o novela LLEVARÁS LUTO POR MÍ, en relación al torero El Cordobés, que el obispo o arzobispo de Sevilla, creo, había llamado la atención o impedido a una turista entrar a la catedral de Sevilla, por llevar ropa no apropiada para entrar en dicho lugar, ropa que hoy es habitual en multitud de mujeres que visitan nuestras iglesias y catedrales. Si hay algún error sobre el lugar o el religioso, mis disculpas.

–        Leí en la prensa que un juez llamó la atención a un joven que estaba besando o abrazando a su novia, en un lugar público. Luego este joven se suicidó.

–        Personalmente, puedo contar la siguiente historia que viví, en los años setenta. Varias amigas nos presentaron a varios chicos jóvenes que eran miembros de la Policía Armada, como creo que se llamaba entonces este cuerpo policial. Estuvimos merendando, un grupo de unas diez personas en los alrededores de Burgos, y luego fuimos todos a una discoteca. Más de cinco personas debiéramos haber pagado nuestra entrada, pero estos policías enseñaron sus placas y pasamos todos sin pagar.

Cuando llevábamos un rato en la discoteca, uno de los policías vio que una pareja de jóvenes se estaba besando y abrazando en un rincón. Este policía, que no dudó en privar a la empresa del pago de varias entradas, se subía por las paredes, si permiten Uds. la expresión, porque quería llamarles la atención. Iba de paisano, como sus compañeros. Finalmente, no les llamó la atención.

– Para que una pareja tuviera una habitación de hotel tenían que presentar el libro de familia. Y era obligatorio el matrimonio religioso.

– Cuando el golpe de estado de Pinochet, en Chile, año 1.973, un español se casó con una chilena detenida, para poder sacarla de Chile. Tuvo que casarles un sacerdote. Para anular luego ese matrimonio, tuvieron que ir a una anulación religiosa.

Ésa era la vida sexual pública en España.

Jesús Ayala Carcedo.