
Hace años, me consideraba un experto en lo que era o es el matrimonio, hasta que, en carne propia, experimenté lo que es el mundo del divorcio: una actividad económica que ocupa a mucha gente, empezando por jueces.
Hoy, hay grandes expertas en estos temas que justifican el divorcio con el fin del amor, y, nuestros políticos, inciden mucho en maltratos. Y me temo que, sin conocer un poco el Código Civil, pocas reflexiones acertadas, es de temer, se puedan deducir.
No sé si Uds. conocen aquella canción que de niños cantábamos, hace ya demasiados años, que empezaba: ¿dónde está la llave, matarile, rile, rile?.
Y esto tiene que ver con el ANTEPROYECTO DE LEY DE MEDIDAS DE EFICIENCIA PROCESAL DEL SERVICIO PÚBLICO DE JUSTICIA En mi modesta opinión, NACE MUERTA, en relación al divorcio.
A partir de 2022, si se quiere divorciar tendrá que pasar por una sesión de mediación o arbitraje y pagar por ello
https://www.mjusticia.gob.es/es/AreaTematica/ActividadLegislativa/Documents/APL%20Eficiencia%20Procesal.pdA partir de 2022, si se quiere divorciar tendrá que pasar por una sesión de mediación y pagar por ello

Hace poco leí, creo reproducir, más o menos bien, la manera de abordar los problemas: Definir conceptos y plantearse metas, hacer un análisis y proponer soluciones.
Y si la meta de la Administración de Justicia es que haya menos pleitos, por un lado, es lo que yo siempre he pensado, y lo aplaudo, pero si no busca la paz social, ¿para qué sirve?.
Y esto pudiera parecer un anuncio en un periódico de contactos: mujer casada de cuarenta años, con tres niños pequeños, sin estudios, sin empleo, quiere divorciarse.
El divorcio, y dejemos de lado la separación o nulidad, se lo garantiza la ley, pero, ¿y lo otro, dónde se alojan y de qué comen?.
Y no podemos abordar estos temas sin que alguien nos defina dos conceptos: matrimonio y divorcio. Y, en mi modesta opinión, son dos conceptos que van unidos: el matrimonio es unión de dos personas, que adquieren un vínculo legal, que, en cualquier momento, a instancia de uno o de los dos, deja de funcionar. Y eso de convivir, pues sin convivencia puede seguir el matrimonio, sin hijos de origen natural de los dos, también. ¿Y quién añade que el sexo entre ambos es algo imprescindible para el matrimonio?.
Y nos hemos encontrado con muchas sorpresas, sobre todo cuando hay tantos/as expertos/as en maltratos psicológicos a lo largo de muchos años, que la llave para salir del matrimonio se ha publicado en el BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO y que las distintas administraciones no tienen la obligación en gastar un solo céntimo de euros en publicarlo en folletos y demás. En lo otro, muchos millones. Denuncias, órdenes de protección, juzgados especializados….
Y para que una mediación familiar, o como quiera llamarse, pueda funcionar hay que ir con la ley aprendida: El derecho a divorciarse es un derecho personal de ambos miembros/as del matrimonio, y que el pueblo español no obliga a ningún componente de la pareja a un solo segundo no querido de convivencia. Y se lo garantiza. Menos llorar y más tratar de dinero y niños.
Y ese anteproyecto indicado pudiera afectar a esa libertad, desde el segundo cero, si exige retrasar presentar la demanda de divorcio y perder los derechos del artículo 102 del Código Civil, que pocos divorciados saben de qué trata. Y este artículo y el 103 del Código Civil se cometan en dicho anteproyecto.
Y si lo que quieren es que se discuta quién debe salir del domicilio familiar, con una mano delante y otra detrás, y seguir pagando la hipoteca, pues qué quieren Uds. que les diga. Copien e impongan la Ley del País Vasco, como mínimo.
Siempre he pensado, ¿qué pinta un hombre en el divorcio de su mujer?. En su divorcio, nada, cuando se entraría en conversaciones dejando todos claro que es un derecho, puro y duro, es sobre las consecuencias. Mientras no se separen el vínculo y las consecuencias, es mezclar las churras con las merinas, que, como sabrán Uds., todas son ovejas, pero de distintas razas.
Me temo que les he puesto demasiados conceptos, y esto puede ser difícil de digerir, por ello, para terminar, les cuento una anécdota familiar. Habíamos estado los dos padres tomando un mosto en un bar, con nuestra hija, de entre cuatro y seis años. Al día siguiente, estando yo solo con nuestra hija, pasamos por delante de ese bar. Mi hija se paró, me miró, y me dijo: papá, te invito a tomar un mosto. Y yo pensé, ¿con qué piensa pagar?. Al cabo de un momento, me dijo: papá, yo invito, pero tú pagas.
El pueblo español garantiza el divorcio (nulidad, separación, divorcio), pero les lanzo la pregunta en relación a la mujer de cuarenta años que les indicaba: ¿es un problema de pareja o de estado?. ¿Lo arreglan los jueces?. ¿No sería mejor hablar de crisis económicas en vez de crisis de pareja?.
Sólo si denuncias, o piensas denunciar, mujer, te ayudamos.
Mientras no se reconozca que hay problemas sociales ajenas a la pareja, y que los juzgados se vienen utilizando para obtener ventajas económicas, y todo vale, intentar disminuir pleitos no es conseguir el fin último de la justicia: hacer justicia y lograr la paz.

Jesús Ayala Carcedo, delegado de la ASOCIACIÓN DE PADRES DE FAMILIA SEPARADOS DE BURGOS-A.P.F.S.-BURGOS.